TIJUANA.- El disco Tino Contreras & Javier Bátiz: Live Session, producido por el Centro Cultural Tijuana, fue el tema en la Sesión de Escucha de la Cineteca Nacional, en la Ciudad de México, con la participación del jazzista mexicano y el antropólogo Pablo Iván Arguello.
En Live Session el jazz y el rock se fusionan con la aportación de dos leyendas de la música popular en México y al respecto Contreras compartió su experiencia en torno a la manufactura de un material discográfico que ha conjuntado a dos leyendas vivas de la música popular en México.
El disco incluye 15 cortes donde los talentos del baterista y del guitarrista, originario de Tijuana, confluyen para marcar un hito histórico en la música. Y conjunta dos poderosas manifestaciones artísticas trascendentales en la historia musical en México: Las cuerdas del gran Javier Bátiz, proclamado Padre del Rock and Roll mexicano, y los tambores del más célebre baterista del país, leyenda viviente del jazz nacional, Tino Contreras.
“Inicié mi carrera hace 75 años y tengo grandes planes, yo estoy con la música y con mi país. Estoy trabajando para México en el aspecto cultural que hace mucha falta, que nadie habla de eso. A mis 94 años compongo todos los días, toco mi batería, el piano, practico la trompeta, el canto, la composición”, dijo.
“Este disco lo quisimos hacer porque era necesario para reunir, el antaño con el hogaño y el hogaño con el futuro y ahí nos vamos. Hicimos una simbiosis extraordinaria”, indicó Contreras.
“Es un disco bastante extraordinario porque el rock es hijo del jazz, y si no hubiese existido el jazz tal vez tampoco hubiera existido el rock”, enfatizó Tino, el pasado 23 de abril desde la Fonoteca Nacional en la Sesión de Escucha.