TIJUANA.- La Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo (CANACO SERVYTUR) consultará y establecerá gestiones directas ante la Secretaría de Economía, a fin de determinar exactamente cuáles serán las afectaciones para el comercio fronterizo luego de la medida arancelaria anunciada por el gobierno de Estados Unidos, que entró en vigor este 1 de junio.
El titular del organismo empresarial, Lic. Mario Escobedo Carignan, enfatizó que la medida viola francamente las normas internacionales de comercio, y quebranta el espíritu del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), que todavía está en vigor.
“Para empezar la primera afectación la tendrán las exportaciones de manufactura de acero, donde México tiene una participación del 11.9 por ciento de las importaciones norteamericanas: en tanto que en el caso del aluminio representa el 4.7 por ciento”, indicó
En ese mismo sentido, comentó que la respuesta del gobierno Mexicano fue establecer impuestos de importación a productos norteamericanos, que en suma equiparan el monto económico de daño a los productos nacionales, estimado en principio en alrededor de cuatro mil millones de dólares.
Explicó que los productos estadunidenses elegidos por las autoridades mexicanas son el acero plano, las lámparas, piernas y paleta de puerco, embutidos, y alimentos como manzanas, uvas, arándanos y quesos, entre otros.
“Esta controversia comercial, como ya se pudo advertir, no solo distorsiona los volúmenes de intercambio comercial entre México y Estados Unidos, está trayendo consecuencias importantes en los mercados financieros y en el comercio mundial, el único afectado será el consumidor por el encarecimiento de estos productos”, consideró.
Para el caso de la región fronteriza, opinó que la guerra comercial no conviene a nadie, por lo que representa un foco rojo para el sector comercio, porque esas medidas arancelarias implementadas por México pudieran repercutir en el abasto y encarecimiento, principalmente de los productos alimenticios, cárnicos, frutas, entre otros.
Lo cual a su vez nos crea un alerta por el curso que pudiera tener la negociación del TLCAN 2.0, ya que el abasto regional depende de un 80 por ciento de productos originarios de Estados Unidos.
“Este tema nos preocupa porque el más afectado será nuestro consumidor local, porque los costos de importación se van a incrementar, siempre y cuando dichos artículos no estén dentro del Decreto Comercial Fronterizo, por ejemplo la manzana, pero esta beneficiada por el decreto”, subrayó.
De la misma forma, refirió que iniciará contacto con las Cámaras de Comercio estadunidenses a efecto de que se haga un llamado a las autoridades de Comercio de ese país para hacerles ver los prejuicios que este tipo de medidas causan a la economía, a los productores y a la cadena comercial.
Para finalizar, Escobedo Carignan expresó que la razón de afectación a la seguridad nacional que aduce Estados Unidos para la aplicación de tal medida comercial, es inconsistente, insostenible y contraria totalmente a las reglas de la Organización Mundial de Comercio (OMC), cuando el trasfondo real obedece a medios de proteccionismo y amago político, tratando de poner sus posturas en los temas más relevantes de las negociaciones del TLCAN.