Rosarito.- Mientras que defensores de los animales lamentan que el nuevo reglamento de Protección Animal naciera muy debilitado, los Animalistas trabajan por su cuenta al operar aquí al menos tres santuarios de protección de animales domésticos. Con población sobre todo de perros y gatos, estos centros reciben un promedio de cien mascotas, que en su mayoría son rescatadas del abandono y la omisión de cuidados, otros quedan abandonados en plena calle. Con varias críticas a los integrantes del Cabildo por la falta de apoyos, los Animalistas insisten en la urgencia de crear una comisión de inspectores honorarios para avanzar en el tema. En la actual administración municipal ya ópera un módulo de control canino a un costado de servicios médicos en donde se ofrecen servicios básicos y accesibles de esterilización, desparasitación y la aplicación de la vacuna antirrábica, lo que consideran un ligero pero importante avanxe.