TIJUANA.- Un primer contingente de 75 migrantes de Honduras, El Salvador y Guatemala llegaron a la frontera con California para solicitar refugio político al gobierno de Estados Unidos, toda vez que advirtieron que sus vidas corren peligro en sus países de origen y son víctimas de la violencia y discriminación.
En dos camiones, los centroamericanos que forman parte de la comunidad Lésbico, Gay, Transexuales y Bisexuales viajaron 30 horas desde la Ciudad de México donde se perfilaron hacia la frontera, mientras la Caravana del Migrante quedó atrás en el centro del país.
En tanto, el gobierno de Donald Trump envió a la frontera de San Diego con Tijuana a más de mil soldados para inhibir y contener a la Caravana del Migrante dentro de la Operación Línea Segura. Esta medida provocó reacciones en ambos lados de la frontera por la criminalización de la migración.
Alan Bersin, exsecretario de Educación de California y coordinador de seguridad fronteriza de Estados Unidos, señaló en una reunión de industriales de Tijuana que el despliegue militar es más político que por seguridad nacional y que más que militarizar a la frontera es necesario revisar las leyes migratorias estadunidenses.
A su llegada a la central de autobuses de Tijuana, César Mejía dijo que su travesía fue “algo tan duro, con nostalgia, pero estamos sanos y salvos, y ahora esperar a que el gobierno de Estados Unidos nos de refugio político, comentó al tiempo de señalar que las dificultades que presentaron fue que agentes del Instituto Nacional de Migración los retuvieron pero después les dieron el paso libre.
Otra de las integrantes dijo proceder de El Salvador donde la vida es muy difícil por las pandillas y la violencia por lo que se vio obligada a salir de su país en octubre y se unió a la Caravana del Migrante en Tapachula, Chiapas. “Dios nos ha bendecido y estamos a un paso de nuestro destino”, sostuvo antes de ser integrada a su contingente que se dirigió a un albergue de Playas de Tijuana.
A su llegada se ofició una misa para agradecer a Dios el periplo que registraron desde que salieron de Centroamérica para internarse a México donde coinciden en que fueron tratados bien, sobre todo en la Ciudad de México.
El contingente cuenta con asesoría jurídica y apoyo de organizaciones y abogados de Estados Unidos, quienes incluso fondearon el lugar donde permanecerán durante su solicitud de asilo o refugio en Estados Unidos, a través de la garita de San Ysidro.
Durante la tarde de este domingo, vecinos de Playas de Tijuana increparon la presencia de los migrantes al señalar que “no estamos en contra de ustedes, pero al estar en el ojo del huracán les puede pasar algo a sus familias”.