L.C.C Rosalba Isabel Higuera Angulo
Q’atita Higuera Angulo
“Si no te gusta dónde estás, muévete. No eres un árbol” (Jim Rohn). Sin duda alguna es la frase que miles de Hondureños tomaron en cuenta para salir de su país y emprender su viaje hacia Estados Unidos para obtener un futuro “mejor”.
Como sabemos, el pasado 12 de Octubre del año en curso, más de Más de 2,000 migrantes iniciaron su viaje rumbo a México para atravesar tierras aztecas y llegar a las fronteras que colindan con el país vecino.Los inmigrantes dicen que se van del país por razones de seguridad y un mejor nivel de vida, algunas de las razones principales son: Ilegalidades e inseguridad, Corrupción e impunidad, Violencia doméstica, Coyuntura económica, Catástrofes naturales y Miedo; miedo a lo que pueda venir en años futuros, miedo al comportamiento del gobierno y a cómo son tratados. Que tienen que pagar piso en sus propias casas, que las mujeres son maltratadas y que a los niños no los dejan ser niños, que viven en pobreza extrema y no ven como los trabajos ayuden para mejorar puesto que el gobierno no colabora; son parte de las excusas que se han escuchado por parte de las personas hondureñas que forman la ya famosa caravana.
Hombres, mujeres y niños conforman un grupo de hasta este momento más de 7 mil personas emigradas del país centroamericano. Lamentablemente no todo les ha ido como pensaban, ha habido muertes de algunos integrantes, han pasado hambre y frío pero en realidad nadie dijo que era fácil. Además si no empiezan de buena manera no es un hecho que les tiene que ir de lo mejor, todo es parte de sacrificios para llegar a un fin común.
El cruce a México fue el primer filtro importante para ellos, porque se produjeron enfrentamientos con la Policía. La mayoría cruzó clandestinamente a través del río y sólo algunos lograron permisos migratorios. Pero otros quedaron varados en Guatemala.
Recorrieron tierras mexicanas a pie, de raite, aprovechando algunos de los albergues en diferentes ciudades y estados. Hoy en día, algunos ya llegaron a la ciudad de tijuana donde esperan poder obtener su permiso para cruzar de manera legal a los Estados Unidos.
Cabe mencionar que la primera parte de la caravana hondureña son un grupo de personas de la comunidad LGBT conformado por 85 migrantes, que viajaron en autobuses, actualmente están instalados en la zona Playas de Tijuana, y en los próximos días piensan pedir asilo en la garita El Chaparral, es aquí, donde inicia la duda.¿Porque ese favoritismo al grupo de migrantes?, ¿Quienes son los que costean la estancia del grupo en la ciudad?.
Un segundo contingente llegó y ocuparon albergues en la ciudad, pero algunas personas en cambio decidieron trasladarse hacia playas y quedarse ahí a pasar la noche a esperar. El comportamiento de los integrantes de la caravana no fue nada bueno, llegar y escalar por la barda que divide a un país de otro no habla nada bien de los participantes.¿Cómo quieren que sean tratados de buena manera si ellos no hacen nada por ganarse ese trato?.
Llega también otro grupo de integrantes de aproximadamente 1000 mil individuos, estos, se trasladan por Otay donde esperan encontrarse todos en el parque de la amistad. Y sabemos que aun faltan mas personas por llegar en los próximos días.
Tijuanenses no están de acuerdo con la llegada de los hondureños a la ciudad, y es tal vez por como actúan estos, por cómo llegan a “invadir” y cómo están afectando la localidad.
Sabemos que las personas hondureñas están de paso, solo quieren permanecer en tijuana mientras obtienen su permiso para trasladarse a otro país o mientras consiguen “cruzar”, lamentablemente no la tienen nada fácil, el presidente de los Estados Unidos Donald Trump, se ha encargado de hacerles saber a todos que quiere evitar la entrada de todos los emigrantes, se ha dicho que hasta el año entrante algunos podrían conseguir su permiso de asilo político, pero mientras tanto; ¿Porqué no empezar a ganarse ese mundo mejor?, ¿Por qué no empezar a trabajar para obtener una mejor estancia?, ¿Por qué no moderar su comportamiento y demostrar que quieren superarse?.
Tijuana es una ciudad que ha recibido a miles de personas foráneas ya sea de distintos estados o de distintos países, en la ciudad quien quiere superarse logra hacerlo, hay trabajo para muchos y hay manera sobresalir. Las personas locales solo piden que respeten su espacio, sus calles y no los afecten. Son muy atentas y amables siempre y cuando los demás lo merezcan.
Sin duda alguna no vienen excelentes días para los hondureños, se aproximan días de fríos extremos, pobres de esos niños y esas personas que no tienen un espacio donde habitar ni cómo cubrirse, los albergues no son lo suficiente para el número de individuos que pretenden arribar a la localidad, se necesita de la ayuda de los habitantes de la ciudad y comunidades cercanas para solventar esas necesidades, pero también es necesario que ellos se comporten de manera adecuada y que con trabajo y esfuerzo demuestren ser agradecidos con quienes los acoge y ayuda, que si acepten de los demás pero que no sean totalmente dependientes.