Bujanda, de botarga a millonario

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Ajedrez Político
Por Sergio Anzures y Chavarín

Bujanda, de botarga a millonario
…Otro panista que pierde el piso

Fue botarga en la campaña a gobernador de José Guadalupe Osuna Millán, luego mandadero de Max García cuando ocupó la secretaria particular del gobierno osunista y más tarde se le pegó a Cuauhtémoc Cardona en la secretaría de gobierno, claro con Osuna Millán.
Al terminar ese gobierno, se fue a la campaña a gobernador de Francisco Vega de Lamadrid, como chofer de las avanzadas, y poco a poco se ganó la confianza gracias a sus intrigas.
Al ganar Vega de Lamadrid la campaña y rendir protesta como gobernador, en los primeros meses logró que corrieran a Luis Carreiro, entonces particular de Kiko, posición que ocuparía él. Desde meses atrás, es coordinador de gabinete, y se dice millonario, influyente y presume ser ahijado de la señora Brenda Ruacho.
Su nombre Miguel Ángel Bujanda, personaje que quiere ser diputado local, compite con la oficial mayor del Estado, Loreto Quintero, para ser número uno en la lista del PAN, y no le importa traicionar a sus amigos, con tal de conseguir lo que quiere.
El semanario Zeta, en su edición de la semana pasada, publicó como el joven Bujanda al calor de las copas, amenazó a Oscar Vega para que se bajara de la precandidatura del PAN a gobernador de Baja California.
En doce años cambió su personalidad y estilo de vida, ahora se cree un influyente operador político del PAN y del gobierno de Kiko Vega. Su boda hace dos años en los estudios Baja, en Playas de Rosarito, propiedad del empresario José Galicot y administrado por Kurt Honold, presidente del CEE de Tijuana, fue todo un derroche de dinero.
Asistentes a la fiesta, aseguraron que la boda costo alrededor de 200 mil dólares, Miguel Ángel Bujanda se creyo Leonardo Di Caprio, al tomarse la foto con su esposa en una réplica del Titanic, y sus vacaciones fueron en la provincia de Italia.
Con su salario mensual, primero como secretario particular y ahora como coordinador de gabinete, Bujanda no junta lo que se gastó en su boda, donde el champagne y los vinos de entre 200 y mil dólares, se departieron entre los presentes.
Cuando se encuentra en Tijuana, este funcionario estatal, conocido por su frase “Hermanote”, no sale del starbaucks de la Zona del Rio, donde cita a constructores, como José Luis López Loyes, a quien le consiguió una obra en el CERESO de Ensenada, la cual fue cuestionado por constructores locales.
Bujanda es solamente uno de los panistas que se han servido del poder. Pasaron de vivir de la modestia a la ostentosidad, y lo peor del caso, es que ya se olvidaron de su origen.
Más de una líder de colonia de las que departían con Bujanda cuando fue botarga de Osuna Millán, lamentan que el ahora cercano a Kiko Vega y suspirante a una diputación de lista, vea a la gente por encima del hombro, lo que demuestra una vez más que el poder marea a los políticos.
En otras columnas, difundiremos historias de otros hombres y mujeres que han hecho de la política un negocio millonario.

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