Homologación de códigos civiles estatales, necesaria para permitir matrimonios igualitarios

TIJUANA.- Se debe garantizar y respetar la voluntad de cada persona para asumir su identidad sin ser disminuido en sus derechos, hablando de integridad y la dignidad humana, así lo señaló Evelyn Hidalgo Ruelas, Presidenta del Colegio de Jóvenes Abogados de Tijuana.
Añadió que se trata de un tema de gran relevancia que no debería de presentar el grado de polémica y debate al que se somete ya que los derechos humanos contemplan a todos de forma indistinta y como sociedad tenemos que garantizarlos.
“Afortunadamente México es un país multicultural, sin embargo esa misma multiculturalidad provoca que algunos grupos sean víctimas de discriminación por razón de género, sexo, características físicas, discapacidad y en este caso por las preferencias sexuales que también es un factor importante en la discriminación”, expresó.
Recordó que la suprema corte en repetidas ocasiones se ha mostrado en favor de los derechos humanos para la conformación de matrimonios entre personas del mismo sexo, invitando a las legislaturas de los estados, a homologar sus códigos civiles con lo que ya se encuentra establecido en la constitución.
“La SCJN invita a que se homologuen los códigos civiles estatales con el código civil federal, y lo establecido en nuestra Carta Magna, además cabe mencionar que en Baja California son legales los matrimonios igualitarios y se pueden realizar de manera directa”, aclaró.
Hizo énfasis en el hecho de que Baja California es uno de los estados en donde los matrimonios no tienen que ser a través del juicio de amparo como en otras entidades.
“Actualmente son 19 los estados en los que son legales aunque en algunos de ellos es necesario interponer el juicio de amparo, en el caso de BC no es necesario gracias a que desde el 2015 la Suprema Corte se ha pronunciado en el sentido de no prohibirlo porque ya está establecido en la constitución”, informó.

Comentó que estas modificaciones han dado como resultado que se incrementen los matrimonios de personas del mismo sexo, ya que de acuerdo a las cifras del INEGI, actualmente tenemos una taza de 18.94 matrimonios igualitarios por cada millón de habitantes arriba de los 18 años.
La especialista explicó que el matrimonio es un acto jurídico y su finalidad no se reduce a la procreación, esta tiene una trascendencia mayor que se basa en la identificación personal, la solidaridad entre dos personas adultas que de manera libre y voluntaria deciden unir sus vidas formalizándolo conforme a la ley.
Y que además a su vez genera consecuencias jurídicas hablando de los derechos que en si se desprenden del matrimonio, como el derecho a contar con un servicio médico de la pareja, el derecho a una pensión alimenticia y a ser reconocido como una familia entre muchos otros.
“Considero que en las sociedades democráticas nadie puede interponer un modo de ser, de pensar o de vivir, creo que debemos de ser respetuosos a los derechos de los demás, debemos de reconocer la dignidad humana como base de la sociedad y reconocer que contamos con ideas diferentes pero con los mismos derechos”, concluyó.