Por: Dra. Claudia Edwards, directora de programas
Humane Society International México
¿De regreso a la “nueva normalidad”? Si durante este tiempo de confinamiento compartiste tus días con tu perro y ahora te toca regresar a tu lugar habitual de trabajo, debes manejar la situación lo mejor posible porque él ha sido tu mejor compañía durante esta etapa.
Tienes que estar atento en caso de que se encuentre nervioso o más inquieto de lo normal. También si defeca, orina e incluso destruye objetos, porque puede ser parte de un problema de conducta llamado ansiedad por separación, debido a un lazo de apego exagerado hacia ti desde el momento en que te ausentas por más tiempo.
Según la Asociación Americana de Medicina Veterinaria, la ansiedad por separación es uno de los problemas de comportamiento canino más comunes y se diagnostica en 20% al 40% de los perros referidos a consultas de comportamiento animal en Estados Unidos. Esto sin situaciones tan complejas como la cuarentena mundial que se ha estado viviendo, se sospecha que este número se elevará de manera importante en esta época.
Si tú y tu perro han desarrollado hiperapego, sabrás si tu perro sufre de este problema por manifestaciones ansiosas desencadenadas cuando se queda solo como:
- Destrucción del mobiliario
- Tira diversos objetos
- Orina e incluso defeca fuera del lugar adecuado
- Vomita, saliva, aúlla o ladra demasiado
Es probable que pienses que se está vengando de ti porque saliste de casa más tiempo o llegaste tarde, pero no es así. No obstante, estos cambios pueden ser molestos para la convivencia, por ello debes consultar a un médico veterinario especialista en comportamiento (etólogo clínico).
Mientras lo haces, te dejamos los siguientes consejos para que lo ayudes:
1) Debes comenzar por no recompensar las llamadas de atención que provengan de tu perro.
2) Sí debes prestarle atención y darle cariño cuando no esté al pendiente de ti, es decir, cuando se encuentre relajado, esto para demostrarle que la independencia le traerá atención y deje de estar “de encimoso”.
3) No lo regañes cuando llegues a casa y encuentres desastres porque solo empeorará el estrés y la ansiedad que tiene.
4) No te despidas y sobre todo no lo saludes cuando llegues hasta que él se relaje y se tranquilice. Seguramente será muy difícil para ti, pero le ayudará mucho.
5) Organiza tu tiempo para tomar paseos cortos cercanos a tu hogar. ¡No olvides tu cubrebocas!
6) Establece un horario para comida y para jugar con él. Trata de hacerlo en los horarios en los que se supone estarás en casa, recuerda que ahora pasará más tiempo solo y debemos acostumbrarlos a la nueva rutina.
7) Cuando salgas déjale un juguete interactivo, por ejemplo, los tipo Kong al cual le puedas introducir comida, para que se entretenga y disminuya su ansiedad.
8) También puedes colocar feromonas y poner música con frecuencia modificada especial para relajar a los perros.
Esperamos que estos consejos sean de utilidad. No olvides que el especialista en comportamiento te dará una mejor orientación y tratamiento adecuado para mejorar su conducta y seguir siendo tu mejor compañía.