Procuraduría Ambiental Estatal en Baja California: Una Promesa que Podría Convertirse en Realidad

TIJUANA.- En el marco del segundo informe de gobierno de la gobernadora de Baja California, Marina del Pilar Ávila Olmeda, se esperan noticias significativas para el estado: la posible creación de la Procuraduría Ambiental Estatal. Esta entidad se encargaría de supervisar y garantizar el cumplimiento de las disposiciones legales en materia ambiental y de fauna en la región, una promesa de campaña de la actual líder del Poder Ejecutivo Estatal.

La creación de la Procuraduría Ambiental Estatal se presenta como una respuesta necesaria a la disminución de la capacidad de vigilancia de algunas autoridades ambientales federales. La falta de recursos humanos y materiales ha llevado al cierre de oficinas de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) en los municipios de Ensenada y Tijuana, lo que ha dejado un vacío en la inspección y regulación ambiental en estos territorios.

José Carmelo Zavala Álvarez, director del Centro de Innovación y Gestión Ambiental A.C. (CIGA), destaca la importancia de esta nueva entidad estatal y la necesidad de contar con un líder íntegro y técnicamente capacitado al frente de la misma. Además, señala la urgencia de encontrar fuentes de financiamiento independientes, como un programa de verificación vehicular, para garantizar el funcionamiento efectivo de la Procuraduría.

La propuesta de un programa de verificación vehicular no solo contribuiría a mejorar la calidad del aire en la región, sino que también serviría como fuente de ingresos significativa para el gobierno estatal. Este enfoque, inspirado en prácticas exitosas en el estado de California, podría marcar un paso importante hacia un cumplimiento más riguroso de las normativas ambientales.

El camino hacia una Procuraduría Ambiental Estatal en Baja California es una muestra de la dirección positiva que está tomando el estado en temas ambientales. Sin embargo, como destaca Zavala Álvarez, se requiere una firme voluntad política para convertir esta promesa en una realidad tangible. El compromiso con la protección del medio ambiente y el bienestar de los ciudadanos será fundamental para asegurar el éxito de esta iniciativa crucial para el futuro sostenible de Baja California.