¿Qué pasaría en la frontera si se cerrará una garita en Tijuana ?

TIJUANA.- La dinámica fronteriza entre México y Estados Unidos es extremadamente estrecha; la interdependencia económica, política y social es tal que su bloqueo total causaría estragos significativos.

Específicamente en Tijuana, la ciudad con mayor flujo fronterizo del país, se ha visto afectado en sus cruces peatonales hacia San Ysidro. Aunque no detiene el flujo de turistas en ambas direcciones, ni el de comerciantes o trabajadores, sí incrementa los tiempos de espera, lo cual tiene diversas repercusiones. Sin embargo, en la Garita de Otay, donde existe un cruce aduanero, las afectaciones generan complicaciones económicas para la industria en ambos lados.

El Dr. Alfredo Valadez García, académico de la Escuela de Administración y Negocios en CETYS Universidad Campus Tijuana, señaló que la aduana ha experimentado bloqueos temporales y parciales que han tenido un costo real para diversas industrias.

«En términos macroeconómicos, las pérdidas por el cierre de la garita de exportación son millonarias. Pensemos en flujos intensos de tráilers, mercancía que no llega a su destino para continuar con su ensamblaje o venta, cantidades en kilos, libras. El flujo constante en la aduana y su mercancía es vital para ambas partes».

El académico recordó que, en septiembre, tras la interrupción del sistema aduanal durante unas horas, datos del Consejo Coordinador Empresarial indicaron pérdidas por valor de 15 millones de dólares, ya que cientos de camiones de carga quedaron varados. Por lo tanto, un cierre total, ya sea por días u horas, sería aún más perjudicial.

“Vivir en la frontera tiene consecuencias; es un privilegio estar junto al estado más rico de EUA, pero no todo es positivo. Hay tanta dependencia que, cuando se cortan las relaciones, vienen las afectaciones. Hablar de este tema no es sencillo; han ocurrido eventos similares, es un escenario al que no queremos llegar, pero puede ser evitable”, adelantó.

EL RETO

El académico de CETYS Universidad en Tijuana considera que este es un asunto binacional para México y Estados Unidos. En caso de involucrar el tema migratorio, también implica a los terceros países de donde proviene la población en situación de movilidad.