TECATE.- En una emotiva ceremonia llena de lágrimas y al son de canciones norteñas, el panteón Renacimiento de Tecate se convirtió en escenario de despedida para Angelita Meraz León, una destacada activista y fundadora del colectivo Unión y Fuerza por Nuestros Desaparecidos en Tecate. Amigos, familiares y compañeros de búsqueda se reunieron para rendir homenaje a su memoria y legado de lucha incansable en busca de personas desaparecidas.
Teresita Moreno, amiga y compañera en la búsqueda, recordó a Meraz León como una fuente de motivación constante, capaz de infundir esperanza incluso en los momentos más sombríos. «Su fuerza y determinación nos impulsaban a seguir adelante, sin importar las adversidades», expresó Moreno entre sollozos.
La ceremonia fúnebre contó con la presencia de representantes de la fiscalía estatal y miembros de la Guardia Nacional, evidenciando el impacto y la importancia de la labor de Meraz León en la comunidad y más allá. Su compromiso con la causa dejó una huella imborrable, convirtiéndola en un símbolo de resistencia y lucha por la justicia.
Angelita Meraz León fue brutalmente asesinada a tiros el pasado 8 de febrero en su propio salón de belleza, un acto que sacudió a la comunidad de Tecate y a todos aquellos involucrados en la búsqueda de desaparecidos. El cortejo fúnebre que precedió su entierro el 14 de febrero fue una demostración palpable del profundo cariño y respeto que inspiró durante su vida.
Desde noviembre de 2023, Meraz León había estado bajo amenaza, lo que llevó a las autoridades a proporcionarle medidas de protección, incluido un botón de pánico y rondines de seguridad. Melba Olvera, subsecretaria de Derechos Humanos del gobierno de Baja California, confirmó que se habían detectado amenazas contra ella y se habían tomado acciones para protegerla.
La comunidad y sus seres queridos, devastados por su pérdida, claman justicia y exigen esclarecer las circunstancias de su asesinato. «Ella no fue solo una guerrera en esta lucha, fue el brazo derecho de nuestro colectivo», lamentó Diana, una madre buscadora y compañera de Meraz León. La muerte de Angelita no solo representa la pérdida de una líder y amiga, sino también un llamado a la acción para garantizar la seguridad y justicia para todos los defensores de derechos humanos y periodistas en México.
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