TIJUANA.- El Consejo Estatal Vida y Familia de Baja California ha solicitado a la gobernadora Marina del Pilar Ávila Olmeda que utilice su facultad de veto respecto a la reciente modificación del Código Civil, conocida como la Ley de Niños Trans, aprobada la semana pasada por el Congreso de Baja California.
En una conferencia de prensa, Jesús González, vicepresidente del Consejo, manifestó la preocupación y enérgica oposición de los movimientos y asociaciones pro vida de Baja California ante la reforma del Código Civil. González destacó que permitir a menores cambiar su identidad de género en sus actas de nacimiento sin el consentimiento de sus padres atenta contra la autoridad y derechos parentales, y podría tener graves consecuencias para la niñez.
Acompañado por otros integrantes del Consejo, González explicó que esta reforma es una afrenta a la paternidad y a la unidad familiar, subrayando que «esta reforma no solo socava la estructura familiar, sino que también sienta un peligroso precedente en la educación y el bienestar de los menores, al privar a los padres de su rol fundamental en decisiones críticas de sus hijos». Advirtió además que se abren las puertas a consecuencias irreversibles para la salud y el desarrollo psicológico de los niños.
El vicepresidente agregó que la reforma podría facilitar actos de simulación jurídica, falsificación de documentos, suplantación de identidad, e incluso el tráfico y trata de menores. Expresó que estas reformas se han implementado sin un verdadero proceso de consulta y sin la inclusión de voces expertas, lo cual parece orientar una agenda desestabilizadora de la familia.
Jesús González también criticó que, en el ámbito educativo, estas reformas podrían obligar a las escuelas a adoptar políticas contrarias a los valores de la comunidad y afectar negativamente el desarrollo de los estudiantes. Destacó problemas potenciales como el uso de uniformes, participación en competencias deportivas, festivales escolares y el uso de sanitarios, subrayando la necesidad de considerar el impacto emocional y la seguridad de los menores.
Recordó que actualmente los menores necesitan la orientación y autorización de sus padres para tomar decisiones importantes, pero la reforma limita esta intervención en cuestiones de orientación sexual. Finalmente, González hizo un llamado a la ciudadanía, escuelas, maestros, empresarios y toda la sociedad a unirse en defensa de los derechos de los padres y el bienestar de los menores, instando a la gobernadora a vetar la ley aprobada por el Congreso del Estado.
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