Finaliza el domingo la exposición Toledo-Monsiváis en el CECUT

TIJUANA.- La exposición Toledo-Monsiváis vive sus últimos días en el Centro Cultural Tijuana, organismo de la Secretaría de Cultura, donde ha permanecido a lo largo de los últimos casi tres meses.
Alojada en la sala 1 de El Cubo, la exposición reúne 68 piezas del artista oaxaqueño Francisco Toledo, fallecido el pasado 5 de septiembre a los 79 años, y podrá ser visitada hasta este domingo 22 de septiembre.
Inaugurada el 27 de junio pasado, la colección debió ser retirada el domingo 15 de septiembre, pero ante el deceso del pintor, promotor cultural y activista social, la Dirección General del CECUT decidió prolongar una semana más su exhibición para dar oportunidad a que mayor número de personas pueda visitarla.
La exposición comprende dibujos, acuarelas, esculturas en pequeño formato, fotopinturas, cartas, objetos intervenidos y cuadernos dedicados, producto de la estrecha amistad entre el pintor Francisco Toledo y el escritor Carlos Monsiváis.
Definida por Enoc de Santiago, director del Museo del Estanquillo, de donde proceden las piezas, como “la mejor muestra de la extraordinaria complicidad que unió a Toledo y Monsiváis, y una de las colecciones más importantes del artista oaxaqueño”, la exposición permite “observar no solo la veta imaginativa de Toledo sino la profunda amistad que unió a ambos personajes y su adhesión a una serie de causas sociales que robusteció su colaboración”.
Si bien el libro “Nuevo catecismo para indios remisos” es el fruto más conocido de la complicidad intelectual entre Toledo y Monsiváis, no es el único trabajo conjunto que llegó a convertirse en libro, cuya estrecha amistad fructificó en proyectos como “Lo que el viento a Juárez”, catálogo de presentación de 46 piezas en técnicas mixtas sobre amate y papel del artista oaxaqueño, cuyo prólogo escribió Monsiváis, parte de la cual se muestra en El Cubo.
La complicidad entre estos dos “pilares de la cultura nacional” se volvió a repetir en la edición conmemorativa de los 50 años de la publicación del “Manual de zoología fantástica” de Jorge Luis Borges, para lo cual el Fondo de Cultura Económica encargó los grabados al maestro oaxaqueño, los cuales dieron origen a la colección Toledo-Borges, cuyo catálogo también prologó Monsiváis.
Amante de las figuras zoomorfas, no es casual que en la colección del artista juchiteco que exhibe el CECUT pululen imaginarias representaciones de iguanas, chapulines, murciélagos, caracoles y otros animales que el artista recreó de mil maneras.
Hay también en esta muestra variedad de retratos y representaciones de Monsiváis, metamorfoseado en gatos pachones y robustos o bien en figuras en que se puede reconocer plenamente al escritor, al igual que un grabado del autorretrato de Toledo, cuya reproducción a todo lo ancho de la puerta de la Sala 1 de El Cubo da la bienvenida a la exposición.
Vista de conjunto, si algo demuestra claramente esta colección de arte mayor es la estrecha amistad que unió a ambos personajes, la cual se extendió más allá de la muerte del escritor en 2010 y a la colección Toledo-Monsiváis se sumó “La Gaturna”, urna de barro pintada al óleo por el artista juchiteco que guarda las cenizas del escritor y la cual se encuentra en el Museo del Estanquillo.
A la par de la exposición Toledo-Monsiváis, la librería Educal-Fondo de Cultura Económica (FCE), localizada en el Vestíbulo del Domo IMAX, aún tiene en existencia el libro-catálogo de esta colección.
Profusamente ilustrado con reproducciones de las obras que se exhiben en El Cubo, el libro-catálogo contiene textos de Francisco Vidargas, Rafael Barajas “El Fisgón”, Sergio Pitol, Elena Poniatowska y, desde luego, Carlos Monsiváis, en una edición cuidada con esmero que cuenta, además, con la traducción de los escritos al inglés.
La colección Toledo-Monsiváis podrá ser admirada, como última fecha, este domingo 22 de septiembre en la Sala 1 de El Cubo, donde podrá ser visitada de 10:00 a 19:00 horas, con entrada libre ese día.