TIJUANA.- La ineficiencia de la Comisión Estatal de Servicios Públicos de Tijuana (Cespt) para garantizar el suministro a la población ha hecho crisis por la falta de respuesta para hacer frente a las múliples problemáticas que se registran.
La losa que pesa sobre el director de la paraestatal, Rigoberto Laborín es grande al mantener en el cargo a Eliel Vargas Pulido, subdirector de mantenimiento hídrico y responsable del caos que impera en Tijuana.
En días pasados fue difundido en redes sociales un video en donde Vargas Pulido, informa a la población que llevan avances considerables en el Cañón del Matadero, sin embargo, los cortes en las colonias aledañas persisten y hasta el momento no hay solución.
Ante la falta de capacidad de la paraestatal para resolver la contingencia se tuvo que pedir apoyo técnico y equipo a los Estados Unidos, al igual que maquinaria a la paraestatal en Tecate.
Otro problema que involucra a la Cespt son los socavones registrados en distintos puntos de la localidad, producto de reparaciones, sin embargo, transcurren meses y no se bachean las vialidades.
Fugas de aguas a lo largo y ancho de Tijuana, robos e instalaciones vandalizadas, así como múltiples omisiones son parte de la responsabilidad que recae sobre Eliel Vargas, quien se ha convertido en uno de los hombres de confianza de Rigoberto Laborín.
El subdirector de mantenimiento hídrico afirma entre su circulo de amigos que está en su cargo por sus méritos y capacidad sin importar que fue adulador del ex gobernador del estado, Francisco Vega de Lamadrid y el ex alcalde de Tijuana, Jorge Ramos.
En contraparte, los políticos afines a Morena analizan perfiles de profesionistas que pudieran con el «paquete», porque transcurren los meses y la problemática se agudiza en Tijuana.