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TIJUANA.- Muere Othón Cortez, una persona solidaria, amable, respetuosa y trabajadora, amoroso esposo y padre de familia.
De un paro cardíaco murió en su casa, rodeado de su familia, a quien tanto amaba.
Othón Cortez fue injustamente detenido por la entonces Procuraduría General de la República, acusado de ser el segundo tirador del asesinato del candidato presidencial del PRI, Luis Donaldo Colosio, el 23 de marzo de 1994 en Lomas Taurinas de Tijuana.
En febrero de 1995, un año después del magnicidio de Colosio, Othón Cortez fue detenido..
Un año y medio estuvo recluido en el penal de Almoloya de Juárez (ahora Altiplano), obteniendo su libertad.
En múltiples ocasiones pidió la reparación del daño a su persona y su familia, nunca encontró respuesta de los anteriores presidentes de la República.
Confiaba en que el presidente Andrés Manuel López Obrador le pidiera perdón a nombre del gobierno mexicano por la detención, torturas y humillaciones de las que fue objeto.
Parte de su enfermedad renal y diabetes fue ocasionado por esa detención y torturas sufridas, siempre lo refirió Othón Cortez.