AJEDREZ POLÍTICO
TIJUANA ENTRE DOS PANDEMIAS
LA DE LA VIOLENCIA QUE GENERA MUERTES A DIARIO
Y LA DEL CORONAVIRUS, QUE LO HACE AL MISMO RITMO
POR: SERGIO ANZURES
Tijuana está mal y de malas como aquel slogan de políticos pero en sentido inverso ¿por qué? Más de una década ha transcurrido—época de gobiernos panistas y priistas— y sus ciudadanos se han acostumbrado a vivir con la violencia diaria.
Los asesinatos a todas horas del día no distinguen zonas geográficas como tampoco lo hace Covid-19.
Sin embargo uno afecta la integridad física y otro la salud -que vale la pena decirlo-, la salud mental como efecto colateral de la cercanía con la muerte.
Incluso, la capacidad de asombro de la mayoría de sus habitantes ha desaparecido frente a los hechos de violencia.
Ahora tenemos otra «ola» de muertes diarias a consecuencia del coronavirus.
Dos pandemias, la de la violencia qué tal parece no distingue gobiernos ni partidos políticos y que ha generado más de diez mil muertos en los últimos doce años y la que acaba de llegar, la del COVID-19 y con consecuencias fatales y grave costo colateral.
Por ejemplo, del primero de abril al 15 de mayo del 2020 han asesinado a 280 personas en Tijuana, según las estadísticas de la propia Fiscalía General del Estado.
En esa mismo lapso, en Tijuana, por coronavirus han fallecido 349 personas, de acuerdo a la Secretaría de Salud de Baja California.
Si sumamos ambos grupos de muertes traducidas en números, tan solo en 45 días han fallecido 629 personas en Tijuana (un promedio de 14 diarias), sin contar las defunciones por otras enfermedades clasificadas como atípicas.
Especialistas en temas de seguridad, coinciden que desgraciadamente cada año se rompe récord de ejecuciones en Tijuana y la autoridad no atina a frenar ese flagelo y que muchas veces minimizan al señalar que los homicidios son pleitos entre grupos criminales.
En el caso de la pandemia suponemos que puede tener fecha de caducidad, cuando se descubra la vacuna, aunque los fallecimientos continúan porque la gente no se queda en su casa y no distingue las actividades esenciales por eso la propagación del virus no se detiene.
Los ciudadanos con problemas de salud —hipertensión, diabetes y sobre peso— y de edad avanzada pueden seguir siendo los más afectados aunque se ha documentado otros grupos vulnerables.
Es la Tijuana actual, hoy los ciudadanos viven cercanos a la muerte entre dos pandemias que afectan su salud física y su salud mental, ambas pueden prevenirse pero dependerá de los ciudadanos y de los gobiernos que se garantice la salud y la seguridad que tanto anhelamos en Baja California.