WASHINGTON.- El FBI incluyó este jueves a Rafael Caro Quintero, capo mexicano del narcotráfico, acusado de asesinar a un agente federal en 1985, a su lista de los «Diez fugitivos más buscados«, después de que se presentaron nuevos cargos en su contra por sus continuas actividades delictivas.
Caro Quintero enfrenta cargos criminales presentados en una corte federal en Brooklyn, Nueva York, y el Gobierno ofrece una recompensa de 20 millones de dólares por información que lleve a su arresto.
Las fuerzas policiales dijeron este jueves que creen que Caro Quintero aún es un miembro activo del Cártel de Sinaloa.
«Nosotros necesitamos la ayuda del público para hallar a este violento fugitivo», dijo el vicedirector del FBI, David Bowdich.
Caro Quintero fue hallado culpable de ordenar el asesinato del agente especial de la Administración para el Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés) Enrique ‘Kiki’ Camarena y cumplió 28 años de condena en una prisión antes de que fuese liberado por un tecnicismo en 2013.
Hace varios años, en una entrevista con la revista Proceso, el narcotraficante negó haber ordenado el asesinato de Camarena. También dijo recientemente al Huffington Post que no es un narcotraficante ni líder de un cártel.
Robert Patterson, jefe interino de la DEA, desestimó esas afirmaciones y agregó que la agencia está segura de que es un miembro activo del Cártel de Sinaloa. «Sabemos que lo es y él también sabe que lo es», afirmó.
Los nuevos esfuerzos por arrestar a Caro Quintero ocurren pocos meses antes de que el capo Joaquín El Chapo Guzmán enfrente un juicio en septiembre por su rol en la dirección de una operación global de narcotráfico como líder del Cártel de Sinaloa.