Por Beatriz Aguilar Alejandrez
Ciencia que proviene de la medicina forense centrada en el uso de herramientas y técnicas científicas idóneas que facilitaran la extracción de imágenes viables de un cadáver, su principal objetivo será reacondicionar los tejidos de manos y pies encontrados en restos cadavéricos, de esta manera el proceso dactiloscópico podrá obtener el diseño de las crestas papilares lo más nítidas posible, siendo así otra forma de intentar identificar a la persona.
El estudio del cadáver ofrecerá analizar los diferentes tipos que hay, como lo son, cadáver fresco, cadáver en estado de descomposición, cadáver quemado, cadáver momificado y cadáver ahogado o saponificado (este último es el cambio químico por hidrólisis que presenta la grasa corporal al convertirse en un compuesto céreo, similar al jabón) resultado de cadáveres sumergidos en agua.
Dependiendo del tipo de cadáver que se analizará y el grado de descomposición será el proceso de identificación que se utilizará, algunas circunstancias que podrían dificultar el reconocimiento serían factores de salud que habría tenido la persona, su complexión e intervalo post-mortem.
En cadáveres frescos, se procederá como se haría con una persona viva, en caso de rigidez se deberá aplicar calor sobre los músculos hasta que regrese la flexibilidad y así poder tomar la muestra; en cadáveres en estado de putrefacción, se requerirá solo una parte de piel que se encuentre bien conservada para poder analizarla; en el cadáver quemado, los cuerpos se descomponen mas rápido de lo usual, se cortara un fragmento de piel si esta se encuentra seca, se hidratara con solución de hidróxido de sodio o potasio, si la piel se encuentra dañada se deberá aplica liquido reconstructor para poder extraer una parte.
En cadáveres momificados, los restos estarán rígidos y carentes de elasticidad, en este caso para obtener una muestra se utilizará talco o yeso para rellenar y así permita la correcta visualización de los diseños, otro método es vaciado de látex líquido, una vez seco ofrecerá una imagen invertida; en cadáveres ahogados, cuando un cuerpo ha permanecido por un lapso largo bajo el agua, la piel sufre daños externos, en este caso será necesario aplicar alcohol o acetona y dejar secar para su análisis, en caso de no dar resultado, se deberá sumergir en agua caliente.
Según un estudio realizado en el 2020, en México se han registrado 38, 891 cuerpos que han pasado por Servicios Médicos Forenses (SEMEFO) sin que se haya logrado su identificación, por lo que se dieron a la tarea de crear un registro público nacional que contenga las características físicas de cada cuerpo, como lo sería sexo, rango de edad, rango de estatura, color de piel, cabello, ojos, ofreciendo también señas particulares como lo son los tatuajes, lunares y cicatrices las cuales facilitaran su identificación, esto incluirá estado de procedencia, si cuenta con certificado de defunción, perfil genético, necropsia, año de registro en SEMEFO y destino final donde fue depositado.
La identificación de un cuerpo es de suma importancia en el ámbito forense y como personas sabemos que en algún lugar habrá alguien que los echan de menos, toda la información contenida en esta base de datos interactiva será de utilidad para dar tranquilidad a familiares y que puedan encontrar y enterrar dignamente a sus seres queridos.
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